La ciudad alemana ha tenido que reducir las jornadas laborales por el confinamiento parcial que afronta, como medida para evitar la propagación del virus COVID-19.

El instituto económico Ifo informó que el mayor número de casos vienen de las industrias por lo que se ha tenido que poner restricciones.

Alemania había regresado a sus actividades de trabajo para ayudar a los sectores del turismo y restauración, pero se ha visto un grave aumento de cifras.
Ifo recomienda el uso del sistema reductivo del horario laboral como medida de prevención y no albergar a muchas personas en un solo lugar.

Señala en encuesta de alrededor de 7.000 empresas mostró que la proporción de empresas que utilizan el sistema aumentó del 24,8% en octubre al 28% en noviembre.

Reducir la jornada laboral permite un mejor descanso de los trabajadores y compensar la diferencia salarial.

Por lo tanto, Alemania tendrá que poner en práctica nuevas medidas para reducir los números en torno al COVID-19 que ya ronda el millón de casos.

Mientras que se ha regresado a la educación en línea y toque de queda.