Hace 10 años las enfermedades cardio cerebrovasculares aquejaban en su mayoría a personas mayores de 65 años, hoy los pacientes de este tipo de accidentes son personas de hasta 40 años de edad, confirmó el especialista en urgencias médico quirúrgicas Jesús Armando Flores Álvarez, quien es director de Enseñanza, Capacitación y Calidad en Salud, de la propia Secretaría.

“Cada vez es más frecuente que se presentan este tipo de problemas en personas jóvenes, vemos a personas de 40 años con infartos, personas jóvenes con infarto cerebral o con una hemorragia intracerebral”, añadió.
La causa de esta reducción en la edad de prevalencia se debe a que los factores de riesgo, como diabetes, hipertensión, obesidad se presentan también cada vez a edades más tempranas entre la población a nivel mundial y todo esto depende del estilo de vida que llevan los pacientes y en general las personas.

De igual forma, el incremento gradual de este tipo de padecimientos, apunta a que de 2006 a la fecha se han incrementado un 30 por ciento los casos en el mundo de personas que sufren un accidente cerebro cardiovascular.
Además del hecho de que este tipo de problemas tienen un periodo muy corto de atención, un infarto da un margen de seis horas para que el paciente reciba atención médica y un infarto cerebral reduce el tiempo a cuatro horas, las secuelas son graves en la mayoría de los casos.

“Se han implementado muchas políticas públicas encaminadas a disminuir la mortalidad, sin embrago no hemos podido impactar realmente sobre este número, a pesar de los avances de la tecnología y de la farmacología, no hemos podido impactar en la mortalidad y esto es a nivel mundial, desde hace 20 años sabemos de qué nos morimos y aun así no hemos podido impactar”.

Los síntomas por ejemplo de un infarto cerebral son dificultad para hablar, desviación de los ojos, parálisis en la cara, debilidad en la mitad del cuerpo, desorientación, habla incoherente, agitación y crisis convulsivas, para quienes están cerca del paciente es crucial que haya una respuesta rápida, porque de ello depende que las secuelas sean menores.

Actualmente el 10 por ciento de las urgencias reales que reciben los hospitales en el estado corresponden a este tipo de padecimientos, lo que las coloca en el primer lugar, en segundo ligar están los traumas, por ejemplo los accidentes.