El senador, José Ramón Enríquez Herrera, quien aspiraba a la gubernatura de Durango por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), permanece indignado por no haber sido el elegido, y sí su compañera de partido, Marina Vitela.

En tal sentido, este martes arrancó su llamada Caravana de la Justicia, pues asegura: “No daremos marcha atrás contra criterios oscuros que van contra la democracia, decisión y opinión de la gente”.

Enríquez Herrera comentó que el día 18 de diciembre ya estaba firmada la designación de candidatos en los estados, algo que no habrá de permitir, pues “ha sido una lucha incansable de muchos seres humanos, porque este país cambie, por la honestidad, porque se haga lo correcto, porque la esperanza de México sea realidad, y que no unos cuantos empañen a través de una simulación y engaño como lo han hecho”.

Explicó que aunque ya se tenían designados los candidatos en Oaxaca y Durango, fueron parte de un simulacro, pues el día 22 de diciembre participaron en conocer las encuestas.

Hay inconformidad, dijo, porque no se respetaron las encuestas. El morenista expresó que Durango merece ser respetado. “Durango está estancado, Durango necesita inversiones para generar oportunidades, y para eso se necesita un cambio de Gobierno, estamos convencidos que que tuvimos el respaldo de los ciudadanos duranguenses, a través de la opinión en una o muchas encuestas”.