El delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Gustavo Enrique Pintos Gutiérrez informó que debido a los daños que sufrió el acelerador lineal del Instituto ha sido necesario canalizar a 30 pacientes al Hospital de Cancerología y al Centro de Especialidades en Torreón Coahuila para recibir atención médica.

“Al último corte teníamos un registro cerca de 30 pacientes que habían acudido con nosotros y los referimos a estas dos unidades, tanto al Hospital de Cancerología dependiente de la secretaría de Salud y también a la unidad Médica de Alta Especialidad que se encuentra en Torreón Coahuila”, apuntó.

A pesar de que el funcionario federal dio por concluida la contingencia del pasado 30 de septiembre, que inundó el Hospital de Zona Número Uno, al restablecer los servicios en el Hospital de Zona Número Uno al 100 por ciento, el reporte de daños aún no ha sido emitido por parte de la aseguradora.

“Estamos en ese proceso de evaluación de la mano con nuestra aseguradora, personal del área de finanzas de oficinas centrales que está dictaminando aquel equipo médico que obtuvo algún daño mayor, afortunadamente todo nuestro equipo está respaldado”, añadió.

Sobre los señalamientos que apuntaban hacia un probable brote infeccioso derivado de la inundación, el delegado rechazó que exista tal posibilidad “no hay ningún tema de una infección nosocomial, ya hicimos estudios patológicos, levantamos muestras por distintas áreas de nuestro Hospital, donde podríamos tener algún riesgo y todas estas pruebas han sido negativas”.

En el caso del acelerador lineal, Pintos Gutiérrez agregó que es técnicamente imposible una fuga radiactiva, como se ha denunciado a través de redes sociales, sin embargo tampoco se tiene una fecha para el reinicio de los tratamientos debido a que será la aseguradora quien adquiera de nueva cuenta el aparato y lo instales en el Hospital del Instituto.