De junio a septiembre del presente año se contabilizaron más de dos mil 300 muertes de ganado en la ciudad capital, situación que consideró complicada el director de Desarrollo Rural, Jesús Héctor Flores Morales.

Explicó que en este año la mortandad, se derivó por la falta de agua en los abrevaderos y de pastizales, por consecuencia de la sequía, misma que sigue haciendo estragos en la zona rural del municipio de Durango.

“Fue muy complicado para la parte agrícola desafortunadamente de las 58 mil hectáreas con las que cuenta el municipio de Durango, 38 mil de temporal la producción fue al rededor de un 30 por ciento lo que se sembró nada más” confirmó.

En tal sentido el funcionario confirmó que para este año se puede hablar de perdidas totales y parciales en el campo duranguense, ya que en zonas como Valle Florido donde se produce frijol, la planta está en buenas condiciones, no obstante, carece de fruto debido a la falta de agua.

Por ende esos productores únicamente tendrán alimento de autoconsumo, ya que no podrán vender frijol el siguiente año.