Debido a los propósitos de año nuevo que realizan los duranguenses como es el tradicional “bajar de peso” los gimnasios y los consultorios de nutriólogos perciben un incremento de clientes del 50 por ciento, sin embargo, la euforia y la disciplina de quienes se inscribieron los primeros días de enero al “GYM” o visitaron a un especialista en alimentación no dura mucho, pues al llegar marzo, el número de baja un 20 por ciento, asó lo confirmó el nutriólogo duranguense Miguel Guereca.

Asimismo, dijo que una persona puede subir hasta 10 kilos durante la temporada invernal debido a las posadas, cenas navideñas y de fin de año.

“No se tiene un control como tal porque la mayoría de las personas no acude a revisiones previas a estas fechas pero, un aproximado más o menos son de cinco a 10 kilos que se pueden subir durante las fechas decembrinas” comentó.

Finalmente, el especialista en alimentación, confirmó que Durango se encuentra en octavo lugar a nivel nacional de obesidad, situación que debe poner atención los gobiernos.