El comisario ejidal de Otinapa, Raúl Sarmiento Luébanos informó que no ha habido avances en las gestiones de pago de los terrenos de siete ejidos en los que hace más de 10 años se construyó la supercarretera por lo que se mantiene la expectativa de toma de casetas de peaje para el año próximo como una medida de presión hacia la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, quien ha declarado que no tiene recursos para el pago de los terrenos.

Fue el actual delegado de SCT en Durango, Eduardo Bailey Elizondo, quien informó a los representantes ejidales que la dependencia no cuenta con recursos para realizar el pago tanto de las hectáreas correspondientes al derecho de vía como aquellas que fueron dañadas con la construcción de la supercarretera.

A 12 años de la construcción de la obra, los ejidatarios desconocen el valor de sus tierras porque la Secretaría se ha negado incluso a realizar un avalúo de los terrenos, sin embargo exigen que la autoridad federal asuma su responsabilidad en el retraso del pago y que este se haga a precio actualizado.

Para los primeros días de enero, esperan reunirse con el gobernador del estado, José Rosas Aispuro Torres para solicitar que él interceda a su favor en las gestiones de pago, en caso de que no haya avances tomarán las casetas de peaje ubicadas en Llano Grande y Garavitos, como una medida de presión a las autoridades federales.

El comisario ejidal, criticó la falta de voluntad de pago de SCT cuando cada año se le invierten sumas millonarias a la rehabilitación de la vía, la cual además cobra una cuota a los automovilistas que la transitan, mientras que los dueños de las tierras han esperado más de 10 años para recibir el pago por los terrenos.

Añadió que en el caso de Otinapa, son al menos 52 las hectáreas dañadas durante la construcción por las que también exigen una indemnización, pero habrá que agregarse los daños localizados en los ejidos de Coyotes, Navajas, Mimbres, El Pino y Garavitos y las 300 hectáreas que reclaman por derecho de vía.

En abril de 2015 un grupo de ejidatarios montó un campamento en la caseta ubicada a la altura del poblado Coscomate de esta vía, debido a la falta de pago, el conflicto se resolvió ocho meses después con la promesa de pago de la SCT, en aquella ocasión el entonces delegado se negó a revelar el monto que se pagó por hectárea.