El secretario de Actas del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros y Metalúrgicos de la República Mexicana, Sergio Beltrán Reyes acusó que los habitantes de la comunidad de Velardeña en el municipio de Cuencamé enfrentan una situación de emergencia ante la falta de agua.

Explicó que desde la instalación de la mina, propiedad de la empresa Peñoles los habitantes se han enfrentado a la racionalización del agua por parte de la compañía, quien dispone de una toma de agua de ocho pulgadas mientras que los habitantes de la comunidad deben realizar sus actividades con el agua que almacenan durante una hora cada cuatro días.

Además de un abuso por parte de la empresa, el Sindicato señala que es una violación a los Derechos Humanos de los habitantes que no ha tenido atención por parte del gobierno del estado, ya que la denuncia se hizo ante el Secretario General de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones, quien se comprometió a revisar el tema pero no lo ha hecho.

La exigencia de los pobladores es que se restablezca el servicio de agua potable, ya que previo a la instalación de la empresa no tenían problemas de abasto. Si después de cubrir las necesidades de los habitantes de dicha comunidad queda agua para el proceso minero entonces podrán seguir las actividades.

“Eso es una vergüenza, es un atropello, es un asesinato prácticamente porque hay niños, es toda la comunidad de Velardeña, tres mil o cuatro mil familias”, acusó.

Respecto a la huelga que está por cumplir dos meses, en la comunidad de Tayoltita, el representante Sindical apuntó que a pesar de que la empresa insiste en que deben disminuir su plantilla de trabajadores esperan que a más tardar el jueves sea posible reanudar labores.

Esto al insistir en que el personal a desocupar deberán ser los trabajadores próximos a jubilarse y aquellos que han sufrido alguna lesión, en ambos casos deberá haber una compensación por parte de la empresa canadiense.