El delegado de la Comisión Nacional de Defensa de los Pueblos Indígenas (CDI), Francisco Gurrola Rochín informó que pese a las solicitudes a la Secretaría de Salud a la zona indígena llegan médicos cada tres o cuatro meses.

Esto significa que un enfermo debe viajar en promedio 15 horas para recibir atención médica, casi siempre en el vecino estado de Nayarit, debido a que al menos 15 clínicas rurales que se ubican en comunidades de esta zona no cuentan con personal médico ni con medicinas.

En promedio, la CDI tiene conocimiento, por parte del área de Trabajo Social de Hospitales de Nayarit de uno o dos casos de fallecimientos en aquel estado que requieren apoyo para los servicios funerarios y el traslado de los cadáveres a las comunidades duranguenes.

Actualmente, solo las comunidades de Guajolota, Huazamota y Charcos tienen personal médico de forma itinerante, pero la escasez de medicamento complica las labores de atención a la población indígena.

El delegado reconoce que la región indígena del Mezquital enfrenta problemas de salud derivados del alto consumo de azúcar de los pobladores, esto debido a que el refresco es uno de los productos más socorridos por los habitantes de estas comunidades.
Esto ha derivado en cuadros graves de gastritis que al no ser atendidos generan problemas graves y complicaciones en la salud de los indígenas. Por ello se ha solicitado apoyo a la Secretaría de Salud para que inicie una campaña de concientización sobre los riesgos del consumo en exceso de estas bebidas.

Si bien el programa prospera atiende a una gran parte de la población con sus brigadas me´dicas de seguimiento, los no beneficiarios no tienen acceso a esta atención y son ellos la población más vulnerable porque deben esperar los cuatro meses a que lleguen los médicos, con la posibilidad de que no tengan el medicamento o trasladarse hasta el estado vecino.