Clase política no debe decidir sola: Kempis

El problema más grande de México es que los ciudadanos han dejado las decisiones importantes a un grupo muy reducido, sentenció este jueves la directora general del Laboratorio de Convivencia en monterrey nuevo León, Indira Kempis. De visita al estado para una conferencia aseguró que “hemos dejado en manos de otros las decisiones públicas que […]

02/06/2016

El problema más grande de México es que los ciudadanos han dejado las decisiones importantes a un grupo muy reducido, sentenció este jueves la directora general del Laboratorio de Convivencia en monterrey nuevo León, Indira Kempis.

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De visita al estado para una conferencia aseguró que “hemos dejado en manos de otros las decisiones públicas que afectan nuestra calidad de vida, la salud, la educación, las artes, la cultura, la transparencia y la rendición de cuentas”.

Es importante que la gente se involucre en la toma de este tipo de decisiones pero además dijo, es urgente porque los problemas van en aumento, no solo en el estado de Durango sino también en otras entidades de la República.

“En esto de resolver problemas no se hacen milagros, tendríamos que entender que hay que estar involucrados, sin nosotros los problemas no se resuelven y con quejas tampoco se resuelven, hay que ser parte del cambio”.

Y el cambio aseguró, no solo implica el salir a votar el día de las elecciones, impulsar cambios también requiere que cada ciudadano exija de manera proactiva “una vez que tu has decidido se vale decir no decidí bien o se vale exigir lo que también las leyes cobijan”.

Reconoció que en México la cultura de la participación ciudadana está en pañales y falta también que la ciudadanía sea consiente de que sus acciones o su inacción afectan a otros y recuerde que tiene responsabilidades para con el bienestar de la sociedad.

El voto nulo, señaló no es más que un síntoma de la profunda desconfianza que existe en México de las acciones y las decisiones de los otros, es decir de los gobiernos o los representantes políticos pero el problema es que a pesar de ello hay una resistencia ciudadana a tomar el mando.

“A mi se me hace muy radical porque te deja sin esperanza, creo que este síntoma de desconfianza está para que quienes si van a ir a las urnas decidir a conciencia qué es lo que quieren para el presente, porque en México estamos en una espiral en la que no pensamos por quién vamos a votar”.


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