Son 500 los trabajadores de la Secretaría de Salud que ya cumplieron con la edad mínima para acceder a una pensión que se niegan a jubilarse debido a que el monto de la pensión significaría una disminución de sus percepciones. A ellos el gobierno del estado les otorgaría un bono de 200 mil pesos pero no permitirá la herencia de plazas.

César Humberto Franco Mariscal, titular de la dependencia explicó que no se trata de un esquema de jubilación anticipada sino que se trata de un estímulo para la jubilación, en el caso de quienes ya cumplieron con la edad mínima requerida o el tiempo laborado.

La entrega de este bono de 200 mil pesos para cada uno de los trabajadores forma parte de la restructuración que lleva a cabo la Secretaría desde el comienzo de este gobierno, la cual ha provocado desencuentros entre los trabajadores y las autoridades.

Con respecto al privilegio que el secretario general de la sección 88 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSSA), Martín Rocha Hernández aseguró tendrán los hijos de estos trabajadores de heredar la plaza, el secretario aseguró que es un malentendido.

“En el contrato colectivo de Trabajo hay un escalafón que debe de respetarse y si usted tiene 10 años esperando una plaza no puede venir mi hijo a quitarse la plaza, no es posible porque un escalafón debe respetarse sino violentamos los derechos del Sindicato”, apuntó.

En cuanto al recurso con el cual se les brindará el apoyo a los trabajaodores para agiliza su retiro, el secretario reconoció que este deberá ser gestionado por el Ejecutivo estatal ante el gobierno de la República, pero afirmó que el trámite lleva un 50 por ciento de avance.