La directora del DIF Estatal, Rocío Manzano Chaidez, reconoció que desde el organismo sí han detectado a jóvenes embarazadas y que llegan intoxicadas tras el consumo de drogas.

Explicó que se trata tanto de mayores como menores de edad. “La mayoría de las personas que llegan a tener un bebé, son de 16, de 18 años en adelante. Es mayor el número de jóvenes mayores de 18 años que llegan intoxicadas”.

Pero, reiteró que sí hay casos de menores de edad en estas condiciones. “… digamos una proporción cuatro a uno que llegan a dar a luz y que van intoxicadas, del número de mamás que consumen y que llegan intoxicadas. Porque hay unas que consumen durante el embarazo y en el momento del parto no van intoxicadas”.

Tristemente, dijo, no es raro que al momento de dar a luz sean detectadas las mujeres en una situación de intoxicación derivado de su adicción a alguna droga.

Manzano Chaidez aseveró que en medio de esta situación, los niños presentan síndrome de abstinencia, “es decir, el niño es muy irritable, puede inclusive en caso extremo llegar a convulsionar por la depresión de la droga. (…) Sí se han dado casos aquí en Durango, donde presentan este síndrome, sobre todo en menores de madres de mucho tiempo o de mucha dosis”.