La trata de personas es la nueva esclavitud moderna, y actualmente en este siglo hay más personas bajo estas condiciones que las que había en la época del imperialismo, expresó el ombudsman, Marco Antonio Guereca Diaz.

“La trata de personas es un delito que duele a todos, es el que más afecta la vida del ser humano, porque le quita la dignidad y los convierte en objetos, entran al mercado como explotación laboral, sexual”.

A partir de hoy Durango ya cuenta con un protocolo, dijo, se acaba de concluir. Reconoce que en dicho tema sigue habiendo desconocimiento, en la impartición de justicia, de ahí la importancia de tener un protocolo, pero también es necesaria capacitación para el personal de seguridad.

Si bien destacó el libre ejercicio que pueda tener una persona como trabajadora sexual, es un factor laboral; cuando está privada de su libertad y lo ejerce en contra de su voluntad, ahí se habla ya de trata.