Ante la posibilidad de que el presupuesto de 2018 venga con recortes para el estado, el diputado por Acción Nacional (PAN), Jorge Salum del Palacio afirmó que los excedentes resultado de la renegociación de la deuda significan la posibilidad de equilibrar las finanzas estatales.

Los 600 millones de pesos de los que dispondrá el gobierno del estado correspondientes a excedentes tras la renegociación de la deuda pública vienen a sumarse a los recursos que genera la entidad de manera particular.

El legislador reconoció que los sismos del 8 y el 19 de septiembre, que afectaron el centro y sur del país, se convertirán en un factor en la asignación de los presupuestos “bajo esas consideraciones y dado que los precios de los energéticos no tienen un alza sustantiva me parece que puede preverse que el próximo año el presupuesto federal se reduzca”.

Para un estado como Durango, que depende en un 92 por ciento de los recursos que le asigna la federación, esta es una mala noticia porque significaran menos recursos pese a que Durango en 216 recibió prácticamente el mismo presupuesto que el asignado en 2015.

El Congreso del estado no tiene una proyección de lo que será el presupuesto de 2018 sin embargo el hecho de que se trate del segundo año de gobierno permitirá a la administración de José Rosas Aispuro Torres, gobernador del estado, hacer una planeación más acorde a sus propios objetivos y no a lo planteado por el anterior gobierno, como sucedió en 2016,

“El año pasado fue un presupuesto de alguna manera inercial toda vez que era un gobierno que venía entrando, además con un Congreso en donde el gobernador no tiene mayoría y hubo que hacer algunos cambios” para el año próximo las circunstancias son otras.