Aunque se tiene una administración municipal en mejores condiciones financieras, sí representa un “golpe” el que el Gobierno del estado no pague las participaciones que adeuda por un monto mayor a los 500 millones de pesos.

En ese sentido, el presidente municipal, Jorge Salum del Palacio, reconoció que tienen un retraso en lo que corresponde a las becas, lo cual no podrán cubrir hasta que el Estado pague, sin embargo, avizora que quizá le habrá de tocar al próximo alcalde, José Antonio Ochoa Rodríguez, hacer frente a este pendiente educativo.

“La falta de pago puntual de las becas se dará en su momento, yo espero, cuando ya se reciba el dinero. Que quizá ya no nos toca a nosotros por los tiempos, pero es un recurso que eventualmente tendrá que llegar al municipio”.

Expuso el alcalde que aunque se ha tratado de compensar la falta de pago puntual de las participaciones, con ingresos propios, la realidad es que cada vez es más complicado, sobre todo conforme se acerca el final de la administración.

“Aún así hemos tratado de cumplir todas nuestras contribuciones sobre todo las más importantes, que son las laborales, pero la falta de liquidez empieza a generar cada vez mayores problemas”.