Los conflictos entre empresas del sector minero con las comunidades en las que se han asentado provocarán para este 29017 un desplome del 15 por ciento en la producción minera, según estimaciones de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco).

Ramón Tomás Dávila Flores, titular de la dependencia reconoció que aunque no es un asunto privativo de la entidad, los conflictos como la huelga en San Dimas y las demandas en los municipios de Cuencamé o Tlahualilo contra las empresas mineras se verán reflejados en la producción minera.

“Durango reduce su producción en valor casi el 15 por ciento en valor mineral, que es más o menos el promedio de toda la República, aparte de ser en la parte de exploración también tiene un efecto importante en los conflictos”, destacó.

A pesar de ello el gobierno del estado espera que los sobresaltos entre las empresas y los dueños de las tierras, ya sean ejidos, comunidades o pequeños propietarios no tenga un impacto negativo en el trabajo que se realiza al exterior del país para la atracción de capitales.

Uno de los conflictos con más eco a nivel nacional fue la huelga que inició el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros y Metalúrgicos y la empresa canadiense Primero Mining, la cual duró casi dos meses.

Continúan los conflictos en Velardeña, por la titularidad de la representación Sindical y la demanda por rescisión de contrato del ejido La Sierrita en el municipio de Tlahualilo y recientemente las acusaciones por despojo en el municipio de Indé.