Son al menos 87 las familias que viven en la Presa del Hielo, quienes a pesar de los intentos oficiales se niegan a ser reubicadas, informó el regidor Gerardo Rodríguez quien descartó una reubicación forzada.

Esto, debido a que durante las pasadas administraciones no solo se otorgó de manera regular el permiso de uso de suelo sino que además se municipalizó la zona al integrar servicios como luz eléctrica y agua potable a pesar de las condiciones de riesgo de la zona.

De ahí que se considera que las familias que se niegan a reubicarse, porque consideran que las viviendas que ofrece el gobierno municipal representan una pérdida en su patrimonio en comparación con sus bienes localizados en el bordo de la presa del Hielo, están en su derecho de quedarse ahí.

El regidor destacó que para deslindar responsabilidades sería necesario investigar a toda la red de funcionarios y servidores públicos involucrados en la entrega de permisos ya que no solo interviene el municipio sino también dependencias federales.

Entre estas está la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que es la responsable de presas y represas en el país y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que autorizó la electrificación en la zona pese a los dictámenes de que se trata de una zona irregular.

Ante el inicio de la temporada de lluvias autoridades de los tres ordenes de gobierno han emprendido una campaña de monitoreo constante en la zona, para evitar que lo sucedido el pasado 29 de septiembre, cuando la inundación de la Presa provocó la muerte de cinco personas.

Desborde de Presa del Hielo deja cinco muertos

La madrugada del 29 de septiembre, el desborde de la presa del Hielo provocó la inundación de la Colonia Valentín Gómez Farías, la Virgen, la Morga, Santa María, José Ángel Leal, Colonia Alcaldes, el Puente Negro, el bulevar Dolores del Río, Analco, Tierra Blanca y una parte de la zona centro.

Esa madrugada, el registro de precipitaciones fue de 97 milímetros en ocho horas, lo que significó un 20 por ciento del histórico anual registrado y lo que provocó la muerte de cinco personas y al menos cuatro mil damnificados.