Sembrando vida no tiene modelo de negocio
El programa federal “Sembrando Vida” es poco viable debido a que se aborda la plantación de árboles desde un punto de vista social y no con un enfoque de negocios, sentenció Jorge Fernández de Castro, gerente de la empresa Forestal Alfa. Si bien dijo, la iniciativa que pretende en Durango sembrar 25 mil hectáreas de […]
El programa federal “Sembrando Vida” es poco viable debido a que se aborda la plantación de árboles desde un punto de vista social y no con un enfoque de negocios, sentenció Jorge Fernández de Castro, gerente de la empresa Forestal Alfa.
Si bien dijo, la iniciativa que pretende en Durango sembrar 25 mil hectáreas de árboles frutales y maderables, además de otros cultivos forestales no maderables como el agave, en 15 municipios de la entidad es muy loable, en realidad prevén que sea poco el impacto económico.
Apuntó que es necesario apostar por la sustentabilidad del campo y la plantación de áreas forestales con fines comerciales pero desde un modelo de negocio, no desde una iniciativa social.
Chile por ejemplo, realizó plantaciones comerciales en los años 70 y ahora es una potencia forestal mientras que México sigue sin un modelo de negocios de este tipo.
Añadió que en Durango, el tema forestal sigue siendo rentable porque hay una demanda comercial, mientras que otros estados tienen problemas de tala clandestina porque ello permite a algunas familias llevar el sustento a sus casas.
“La posibilidad de que estas plantas sobrevivan es muy baja, porque como sabemos para que un árbol crezca necesita cuidarse, necesita humedad, necesita un tratamiento”, afirmó.
Además, luego de que el gobierno federal determinó quitar el recurso para el desarrollo de plántula de pino en Durango, esto agregó un componente de riesgo adicional para las plantaciones locales.
El empresario, apuntó que es necesario que las plántulas se desarrollen con semillas de árboles locales para garantizar la adaptabilidad de los árboles en las zonas forestales locales.
El hecho de que la plántula sea de viveros de estados del sur podría impactar en los índices de sobrevivencia de las plantaciones locales.