La diputada por el II distrito, Gina Gerardina Campuzano González acusó que los sindicatos de transportistas han mantenido por años el control del transporte público en Durango y ello ha provocado que los usuarios sean rehenes de los intereses particulares de estos.

Ahora dijo, cuando se pretende generar contrapesos, las autoridades tienen el viento en contra, debido a que la toma de decisiones firmes podría propiciar un paro de transportistas y ello afectaría en primera instancia a los ciudadanos, quienes culparían a la autoridad.

“En muchos sentidos si somos (rehenes) porque ahorita el transporte, no vamos a dejar a la ciudadanía sin transporte, imagínense el caos de decir a ver, se ponen aquí y se hacen las cosas del modo correcto, imagínate que dejemos aunque sea un área sin transporte, nos lincha la ciudadanía”, apuntó.

En el marco de las negociaciones en torno a una Reforma a la Ley General de Transportes, la semana que viene se buscará que el subsecretario de Movilidad y Transporte Urbano comparezcan ante los diputados para que explique e qué condiciones opera la aplicación Jaime en la capital.

La diputada destacó que se han planteado dos hipótesis, la primera que la empresa haya llegado a un acuerdo con un Sindicato para que este permita el uso de placas del transporte público por lo que no habría irregularidad y la segunda que la empresa haya iniciado operaciones de forma irregular.

En el primer caso dijo aunque no hay ninguna irregularidad esto pone de manifiesto que los representantes del transporte buscan mantener sus intereses por encima del bienestar de la ciudadanía y en el segundo supuesto la autoridad debiera tomar cartas para corregir la irregularidad.