Tras la muerte de una mujer en manos de su esposo, quien además lesionó a sus hijos y se suicidó, la titular del Instituto Municipal de la Mujer (IMM), Patricia Alanís Quiñones, dio a conocer las cifras lamentables que se tienen en materia de violencia familiar y de género.

Y es que precisó que son alrededor de 120 llamadas de auxilio por este concepto las que se reciben, pero, lo más alarmante es que de éstas, solamente, máximo tres, se atreven a denunciar.

Según reveló, hay mucho miedo de ir más allá, de dar seguimiento a casos de violencia, pero también, hay amenazas y muchos otros factores. “Hay amenazas y muchos factores que le impiden a una mujer tener esa fortaleza para ir a poner esa denuncia”.

“Dentro de un núcleo familiar se está gestando el agresor, quien está aprendiendo a que la agresión es normal para su persona, y entonces así vamos creciendo, y se considera normal que nos agredan en la escuela, en casa, la pareja, y vamos acostumbrándonos a la violencia. Se ha normalizado y lo más grave, como lo constatamos ayer, es un problema grave de salud pública”.