Las marchas, manifestaciones y demás movilizaciones femeninas –que suelen darse cada 8 de marzo- son necesarias, primero para seguir el camino en busca de la igualdad, pero también para visibilizar los problemas actuales en el género.

Así lo manifestó la conferencista Teresa Baró, quien aclaró que son válidas estas expresiones, siempre y cuando sean pacíficas, en un escenario de respeto, e inclusivas, donde también se tenga la presencia de hombres, pues aseguró que ellos también tienen un papel importante.

En ese tenor, dijo, “el día en que tengamos una igualdad real, no hará falta salir a la calle a reivindicar nada, quizá podremos salir pero a celebrarlo”.

Asimismo, durante su visita en la capital duranguense, refirió Teresa Baró que aunque se levanta la voz cada 8 de marzo, la realidad es que todo el año permanece la lucha y acciones en busca de mejores condiciones para las mujeres.

“Una vez al año le damos una gran importancia a este tema, pero seguimos trabajando durante los 365 días del año”.