El que la ciudadanía tenga una buena cultura sobre el uso de los anafres, calentones, braseros, representaría una disminución importante en el número de intoxicaciones por monoxido de carbono, explicó la responsable estatal de Vigilancia Epidemiológica María del Rayo Arreola López.

Y es que manifestó que si bien el llamado es a evitarlos lo mayormente posible, al final de cuentas las personas siempre buscarán cualquier recurso para mantenerse protegidos del frío, en ese sentido, lanzó una serie de recomendaciones a fin de evitar consecuencias negativas.

Lo importante es la manera adecuada de recurrir a todo tipo de aparatos. En determinado momento que se busque meter un anafre a casa, ésta debe mantenerse ventilada, con puertas y ventanas abiertas, el encerarse es una decisión fatal.

“Generalmente los usan para cuando se van a acostar, para calentar el cuarto, en este caso se debe calentar, después apagarlo y sacarlo de ahí”.

Dio a conocer que afortunadamente en la presente temporada invernal no se han registrado decesos por estas causas.