La violencia entre los estados de Durango y Sinaloa ha dejado entre otros saldos al menos mil 400 personas desplazadas, los cuales deberán ser atendidos por ambos gobiernos estatales, informó el secretario general de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones.

El martes 22 se realizó la reunión del Grupo de Coordinación Sinaloa-Durango, con autoridades civiles y militares de ambas entidades, al respecto, Adrián Alanís afirmó que “se acordó en primer lugar que debemos apoyar a todos los desplazados”.

Según cálculos de los gobiernos, en Sinaloa fueron unas mil 300 personas desplazadas por hechos violentos en los últimos meses mientras que Durando reporta apenas unas 100 personas que tuvieron que abandonar sus viviendas.

El secretario general de gobierno añadió que un 85 por ciento de estas personas regresó a los pocos días a sus comunidades y por ello el compromiso de los gobiernos es blindar las comunidades para evitar nuevos desplazamientos en los límites de Durango y Sinaloa.

“Se va a hacer una Base de Operaciones Mixtas por el lado de Sinaloa, en Concordia donde ha habido bastantes bajas y enfrentamientos y nosotros en los límites de Durango vamos a poner una Base de Operaciones Mixtas”.

En el caso de Durango, la Base se ubicará en la comunidad de San Miguel de Cruces, perteneciente al municipio de San Dimas, la cual se coordinará con las autoridades de Sinaloa.