Dejó PAN deuda de 149 mdp en Pueblo Nuevo

La administración anterior en el Ayuntamiento de Pueblo Nuevo dejó un adeudo de 149 millones de pesos y al menos tres cuentas públicas sin aprobar, lo que además de complicar el escenario financiero impedirá hacer mezcla de recursos para nuevos proyectos, afirmó el alcalde de ese municipio, José encarnación Luján Soto. Dentro del proceso de […]

14/02/2017

La administración anterior en el Ayuntamiento de Pueblo Nuevo dejó un adeudo de 149 millones de pesos y al menos tres cuentas públicas sin aprobar, lo que además de complicar el escenario financiero impedirá hacer mezcla de recursos para nuevos proyectos, afirmó el alcalde de ese municipio, José encarnación Luján Soto.

Pueblo nuevo

Dentro del proceso de entrega recepción, se detectaron irregularidades en la aplicación de fondos federales, además de que el Ayuntamiento tiene adeudos con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con el Instituto Mexicano del Seguro Social y con la Secretaría de Hacienda y crédito Público (SHyCP).

“Registrados son 149 millones de pesos a los que no se les encuentra mucha explicación, sobre todo porque las cuentas públicas no se aprobaron por el Congreso del Estado y se está arrastrando esta situación hasta el día de hoy”.

Solamente, el resultado de una de las auditorias de la Entidad Superior de la Federación (EASF) arroja irregularidades por unos 25 millones de pesos lo que imposibilita al nuevo alcalde a acceder a recursos para nuevos proyectos hasta que no se solventen las observaciones.

Son 12 los proyectos, con un valor de ocho millones de pesos, que el alcalde considera prioritarios para su municipio porque se trata de la mejora en servicios básicos como drenaje y agua potable y que se verían afectados debido a que no se puede acceder a una mezcla de recursos.

“En la Caed (Comisión de Agua para el Estado de Durango) ya nos pusieron un alto porque no se hicieron las aportaciones de 2014 y las de 2015, queremos sentarnos a platicar con el director porque no es posible que nos vayan a querer atar de manos por algo que nosotros no hicimos”.

Una de las cartas de negociación será el mantener en el rango mínimo las observaciones en las cuentas públicas de la nueva administración, que esperan sea tomada como una señal de buena voluntad para acceder a recursos.


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