La Dirección General de Pensiones del Gobierno del Estado tiene una deuda de 427 millones de pesos en créditos emergentes, una modalidad que ha ido incrementándose con los años debido a las condiciones económicas en el país, señaló el director Francisco Javier Esparza Hernández.

Durango tendrá que aprender de los estados que cuentan historias de éxito sobre sus respectivos sistemas de pensiones, ya que a nivel local, la edad de jubilación y por tanto las aportaciones se planearon en base a una esperanza de vida que oscila entre los 60 y los 65 años, cuando en realidad un duranguense vive en promedio hasta los 72 años.

Entonces, deberá crearse un esquema en el que “el trabajador haga las aportaciones necesarias para después poderle entregar lo que va a necesitar para vivir y lo mismo las aportaciones del patrón”.

En el estado son alrededor de 21 mil los trabajadores afiliados a la Dirección de pensiones, de ellos al menos mil 554 están actualmente en cartera vencida, algo que para el nuevo responsable de la dependencia es un indicador de que los procesos de cobranza deben hacerse más eficientes.

Esto debido a que la deuda contraída por los afiliados con la Dirección suma 427 millones de pesos, de ellos en al menos mil 554 casos se trata de cartera vencida, es decir de trabajadores que no están al corriente con los pagos.

Francisco Esparza apuntó que en el rescate a pensiones será imprescindible la participación de los Sindicatos, ya que ellos pueden apoyar no solo en las labores de concientización en cuanto a la educación financiera, sino también en cuanto a llegar a acuerdos para lograr que la dependencia no se descapitalice.

El plazo fatal, hasta 2018 para que Pensiones del Estado sea insolvente, se mantendrá solo si no se emprenden acciones encaminadas a lograr que la dependencia siga cumpliendo su función de soporte para los jubilados pero que los afiliados aporten el monto suficiente para hacer frente a los compromisos.

Actualmente son poco menos de cinco mil los trabajadores jubilados y pensionado en el estado, para ellos es necesario un presupuesto quincenal de 23 millones de pesos para el pago de sus respectivas pensiones, además de otros servicios que reciben, como por ejemplo la atención médica.