La titular de la Secretaría de Finanzas en el estado, Cristina Díaz Herrera informó que la deuda pública estatal directa contratada asciende a seis mil 452.58 millones de pesos, una deuda que con respecto a la recepción de la administración en 2010 creció un 159.8 por ciento.

Adicionalmente el gobierno del estado tiene contratados Proyectos de Inversión y Prestación de Servicios (PIBS) para la conservación y rehabilitación de 10 tramos carreteros de jurisdicción estatal, y a pesar de que también representan pasivos para el gobierno del estado no están considerados dentro de la deuda por tratarse de contratos de prestación de servicios.

El contrato con estos PIBS concluye hasta 2029, es decir que restan 14 años y a precios de junio de 2009 Durango paga una contraprestación de 178.8 millones de pesos por el servicio de conservación anual de 327 kilómetros.

El estado cuenta además con créditos garantizados con bonos cupón cero en Banobras en los programas Punto de Reconstrucción en Infraestructura y el programa de Financiamiento para Infraestructura y Seguridad en Entidades Federativas por 141.37 y 284.16 millones de pesos, respectivamente, lo que suma 426 millones de pesos de deuda contingente.

Debido a que estos son instrumentos financieros en los que se adquiere un cupón que financia Banobras del que la entidad solo paga los intereses, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) no los contabiliza como deuda.

Al 31 de julio de este 2016 el monto de la deuda a corto plazo registra un saldo en cero, esto en cumplimiento con la regulación estatal y federal sobre deuda pública que obliga a las administraciones a saldar estas deudas al menos 90 días antes del cambio de gobierno.

En 2010 la deuda pública de Durango era de dos mil 313 millones de pesos en número redondos, una cantidad a la que debe agregarse los mil 250 millones de pesos que se pagaron por los contratos a largo plazo bajo el esquema de PIBS.