Falta de empleo detona suicidio y embarazo adolescente: IDJ

Debido a que se considera a la falta de empleo como uno de los principales detonantes de la problemática entre la población joven, la titular del Instituto Duranguense de la Juventud (IDJ), Gabriela Vázquez Chacón anunció que buscarán crear un Plan en el que se incluirá a los 39 municipios. Aunque es cierto que cada […]

05/10/2016

Debido a que se considera a la falta de empleo como uno de los principales detonantes de la problemática entre la población joven, la titular del Instituto Duranguense de la Juventud (IDJ), Gabriela Vázquez Chacón anunció que buscarán crear un Plan en el que se incluirá a los 39 municipios.

FERIA DEL EMPLEO

Aunque es cierto que cada región del estado tiene sus propias características, problemas como el suicidio o el embarazo adolescente, además de la violencia contra la población joven, son indicadores comunes y se desencadenan debido a la falta de oportunidades de crecimiento y el primer paso abatirlas es el tema del empleo, afirmó.

“Hay que trabajar en eso, se tienen que hacer convenios, se tiene que renovar e innovar en muchas cosas”, esto a nivel del Instituto Duranguense de la Juventud para lograr disminuir estos indicadores.

A nivel nacional Durango en 2015 ocupó el sexto lugar en embarazo adolescente, para 2016 la Fiscalía General del Estado (FGE) ha reportado un incremento en el número de víctimas de suicidio, la mayoría de las cuales se concentran en un rango de población joven y en edad productiva.

En el caso de los niveles de drogadicción el representante de la Organización Interamericana de Consejos Ciudadanos (OICC), Carlos Güereca Prado ha señalado que la venta de narcóticos y alcohol ilegal son los principales delitos que se presencian pero no se denuncias en la capital del estado.

Según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad Pública (Envipe) que presenta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) la mayor parte de las víctimas de algún delito durante 2015 fueron jóvenes de entre 18 y 29 años de edad, lo que los convierte en un sector vulnerable.


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