Por falta de insumos agreden a pasantes

La Facultad de Medicina y Nutrición (FAMEN) de la Universidad Juárez del estado de Durango (UJED) registra en promedio dos agresiones al año a estudiantes que realizan sus pasantías en comunidades del estado casi siempre por falta de insumos, informó el director de la Unidad Académica, Jorge Arturo Cisneros Martínez. A pesar de que no […]

23/06/2016

La Facultad de Medicina y Nutrición (FAMEN) de la Universidad Juárez del estado de Durango (UJED) registra en promedio dos agresiones al año a estudiantes que realizan sus pasantías en comunidades del estado casi siempre por falta de insumos, informó el director de la Unidad Académica, Jorge Arturo Cisneros Martínez.

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A pesar de que no considera estas agresiones algo alarmante, Cisneros advierte que la causa deriva principalmente de la falta de insumos y medicamentos que sufren los pasantes y médicos en las unidades de salud, lo que hace más complejo llevar a cabo su labor como médicos.

Esto va de la mano, señala con las acusaciones, cada vez más recurrentes de presunta negligencia por parte de los médicos en instituciones de salud en Durango y que a decir del director de la Facultad de Medicina de la UJED se amparan en una legislación injusta para el gremio médico.

“Actualmente un médico si ocurre en una deficiencia en la atención, sin importar cuál, puede tener consecuencias de tipo legal y juzgado como un criminal común que no nos parece justo que por tu trabajo se te vaya a juzgar”, destacó sobre todo si se comprueba que no hubo responsabilidad del médico.

En la mayoría de los casos dijo, se trata de carencias que escapan a la responsabilidad del médico porque corresponden a temas administrativos y de abasto, como por ejemplo la falta de insumos, medicamentos y herramientas de trabajo para brindar una atención de calidad a los pacientes, algo que considera un problema serio.

Las condiciones de seguridad dijo, no son tan precarias como en otras zonas del país pero aun así persisten algunas amenazas, sobre todo a estudiantes que realizan sus pasantías en las comunidades.

“Lo que hacemos nosotros es que a nuestro pasante le tenemos un coordinador que lo atiende que lo asiste y habla con los jefes de enseñanza de las Instituciones y que está obligado a hacer revisiones bimensuales, afortunadamente los casos que ha habido de violencia se han resuelto satisfactoriamente”.


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