La alcaldesa del municipio de Canatlán, Dora Elena González Treviño rechazó que la llegada de paisanos, deportados o que dejan el país por decisión propia, provenientes de Estados Unidos haya alterado la vida cotidiana de las familias en aquel Ayuntamiento.

“Hasta ahorita no tenemos mucha información así que formalmente no, hay gente que dice, ´ya llegó fulano´ y tal pero no tenemos un reporte exacto”, afirmó al preguntarle sobre el número de familias o de personas que han retornado en los últimos meses.

A pesar de que el regreso de paisanos no ha sido masivo, el Ayuntamiento ya se prepara para generar condiciones que les permitan llevar una vida digna, esto mediante opciones de autoempleo.

“Estamos preparados para ofrecerles alguna atención especial y poder ofertar algo en lo que se puedan ocupar, se está promocionando mucho los cursos del Sistema Nacional de Empleo, se les vana dar dos mil pesos al mes a cada persona que participa y se les otorgan siete mil pesos a cada grupo de 25 personas”.

La semana pasada también se entregó un apoyo de 25 mil pesos en especie para proyectos productivos como vulcanizadoras, panaderías y tienda de abarrotes para siete personas que habían regresado deportados del país vecino, esto dentro del programa Somos Mexicanos que se lleva a cabo en coordinación con los tres niveles de gobierno.

En el caso del paso de migrantes por Canatlán, la mayoría de países centroamericanos, la alcaldesa aseguró que su presencia no se deja sentir en el municipio y tampoco ha sido necesario intervenir como Ayuntamiento, debido a que es el Instituto Nacional de Migración (INM) el facultado para el rescate de estas personas.