Al encontrarse las presas del estado de Durango a menos del 50 por ciento de su capacidad, e incluso en algunos casos, a menos del 20 por ciento de su llenado, como la presa Peña del Agila, pues de acuerdo con la Comisión Nacional de Agua (Conagua) el pasado 12 de septiembre se encontraba a 19.2 por ciento de su llenado, el regidor Pedro Silerio García, comentó los problemas que habrá para el campo en los siguientes meses.

“Sus implicaciones ya son inmediatas, ya no se va estar cumpliendo con el plan de riego que implicaba en algunos cultivos cinco riegos, entonces sí puede mermar los rendimientos de las cosechas, pero, ya la más significativa es para el próximo ciclo agrícola ya inmediato que es el otoño-invierno 2023-2024” declaró.

Explicó que al estar en riesgo el siguiente ciclo agrícola, se tendrán que disminuir significativamente los programas de siembras y se estima que sea en un 50 por ciento, y solo se priorizará de acuerdo a la ley alguna praderas, alfalfas y frutales como es el caso de Valle del Guadiana.

“Ya la siembra de algunos forrajes que se hacen como las avenas se estarían disminuyendo esa superficie, la implicación de dejar de sembrar es que no habría oferta de forraje a lo cual tendríamos que buscarlo en otras entidades” confirmó el regidor.