El diputado J. Carmen Fernández Padilla, realizó un pronunciamiento con el que aseguró, el presente y el futuro de nuestro país, depende del cuidado, la atención y solución a los problemas que resentimos todos los mexicanos.

Vivir en una nación con riquezas y vocaciones extraordinarias, también implica políticas y programas extraordinarios.

La vida cada vez es mas difícil, pero eso no tiene que ver con los tiempos, sino con el manejo, la preocupación y la ocupación que se invierte en las causas más importantes, es decir, las causas y los sectores más importantes de un país como México.

La salud, la falta de agua, la agricultura, la sequía, el hambre, y la infraestructura, son los temas que aquejan a la “ciudadanía de a pie”, la ciudadanía con la que yo me identifico, y por la que yo trabajo en las calles, pero también desde aquí.

La sequía, la agricultura y la alimentación, son tres causas que se juntan en una sola ruta. Con la presencia de la sequía el campo no evoluciona, y cuando el campo no evoluciona, nace la crisis del hambre, nace la falta de alimentos y muere la productividad, pero también emerge la escasez.

La escasez del líquido vital también es un asunto complicado. El sector más dependiente del agua es definitivamente el campo: el agro mexicano es altamente dependiente de la lluvia. Años con buenas lluvias se traducen en una alta producción agrícola y viceversa.

Actualmente, la actividad agropecuaria ocupa 134 millones de hectáreas en el país. De esas, el 82 % dependen directamente del comportamiento de las lluvias para asegurar cosechas y cabezas de ganado.

En otras palabras, si las lluvias se retrasan o escasean, la cosecha los hatos ganaderos peligran, lo cual amenaza el ingreso de las familias que dependen directamente de esta actividad.

En temas de salud también estamos en crisis. En este caso, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico , así como otras agencias de nivel internacional, realizan observaciones para México.

En estas observaciones se exhiben fallas importantes en la planeación, la determinación de objetivos, la asignación presupuestaria, pero sobre todo la falta de visión que le está costando la salud y la vida a la población mexicana.

Seguir tomando decisiones de manera visceral, encaminadas por una ideología, seguirá colocando a México en una situación terrible en materia de salud, y, por supuesto, nos alejará de un sistema en el cual los mexicanos puedan tener un acceso digno a los servicios médicos.

En cuanto al rubro de infraestructura, la prioridad de esta administración federal se llama Tren Maya, que para este 2024 se le destinaron 120 mil millones de pesos. Es decir, Secretaría de
Infraestructura, Comunicaciones y Transportes es la prioridad número 8 en el Presupuesto de Egresos 2024. Entonces, Preparémonos para seguir viendo accidentes automovilísticos en las carreteras que conectan a Durango a causa de la falta de mantenimiento carretero.

Hoy en día, atravesamos un proceso electoral que llevará a los mexicanos a renovar y elegir un nuevo gobierno de la República. En ese sentido, hay que recordarle a las y los candidatos, así como a la ciudadanía, cuáles son las verdaderas prioridades de México.