Retuvieron grupos delictivos a 500 migrantes en Gómez Palacio

Partieron la tarde del miércoles rumbo a Ciudad Juárez y estuvieron secuestrados en una localidad de Lerdo

08/12/2022

Gómez Palacio, Dgo.- Luego que más de 500 migrantes se escaparon de una finca ubicada en el ejido El Rayo, perteneciente al municipio de Lerdo, donde los mantenía privados de su libertad salieron en dos caravanas con rumbo a Ciudad Juárez, Chihuahua.

Los migrantes de diferentes nacionalidades de sudamérica, Haití, donde incluso van niños de dos a nueve años, avanzan en su caminata por la carretera Gómez Palacio-Jiménez, resguardados por elementos de la Guardia Nacional (GN), Protección Civil (PC), bomberos y Cruz Roja.

Los indocumentados dijeron que los mantuvieron entre cinco a siete días retenidos en una finca de El Rayo en condiciones infrahumanas, hacinados y con muy poco alimento.
Al lograr salir de su encierro, las personas se dividieron en dos grupos, uno salió alrededor de las 13:00 horas y el segundo una hora después.

Algunos denunciaron que tenían tres días sin comer ni tomar agua, otro grupo señaló que desde hace una semana estaban privados de su libertad, señalando que fueron los propios choferes de las líneas de autobuses foráneos quienes los entregaron a presuntos grupos delictivos.

Mujeres y hombres con bebés en brazos señalaron haber sufrido un viacrucis en su camino por territorio mexicano y pese a ello no cesan en su objetivo de llegar a la frontera con Estados Unidos donde confían obtener refugio migratorio.

Un gran número de los extranjeros cuentan con permiso migratorio por 30 días para transitar por territorio mexicano que tramitaron en Oaxaca y Chiapas, documento que tiene como fecha de vencimiento el 28 de diciembre por lo que decidieron retomar este miércoles su camino a pie.

“Van a cumplir casi tres meses, estuvieron presos por migración, los soltaron, solicitamos la visa humanitaria, pero está tardando demasiado, en un grupo había de 500 a 600 personas, pero hubo disparos ayer en la noche y se separaron y fueron a otro lado, fue cuando se rebelaron y decidieron huir y aunque nunca nos trataron, si nos encerraron, nos quitaron los teléfonos y nos dijeron que teníamos que pagar 280 dólares por cada uno para liberarlos”, narrarón algunos migrantes.


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