Obama tomó represalias contra funcionarios y servicios de inteligencia rusos por los ciberataques en las presidenciales para favorecer a Trump

Ciudad de México.- En represalia por la presunta intervención electrónica rusa en las elecciones estadunidenses, el gobierno del presidente Barack Obama anunció ayer la expulsión de 35 espías rusos con pasaporte diplomático, así como sanciones contra funcionarios de inteligencia y la clausura de dos instalaciones rusas en Maryland y Nueva York.

El anuncio provocó una airada reacción del gobierno ruso, que prometió represalias propias, y quejas por parte de voceros del presidente electo Donald Trump, que el miércoles cuestionó las acusaciones del gobierno de Obama.

Trump tomará posesión el próximo 20 de enero y, probablemente, detendrá al menos parte, si no todas, las acciones iniciadas por Obama.

Por su parte, el presidente electo anunció que mantendrá reuniones con los líderes de las agencias de inteligencia de su país la próxima semana.

“Es hora de que nuestro país avance hacia cosas más grandes y mejores. En el interés de nuestro país y de su buena gente, me reuniré con los líderes de la comunidad de inteligencia para analizar la supuesta injerencia rusa en las elecciones de nuestro país”, dijo Trump en un comunicado escueto.

Las medidas punitivas no incluyeron al presidente ruso Vladimir Putin, aunque el anuncio de Obama consideró que Putin sabía sobre la actividad de piratería, porque “estas actividades de robo de datos y divulgación sólo podrían haber sido dirigidas por los niveles más altos del gobierno ruso”.

El portavoz de Putin, Dmitry Peskov, dijo que el Presidente ruso responderá a las nuevas sanciones estadunidenses y que “no hay duda de que dicha respuesta hará que Estados Unidos se sienta muy incómodo”.

Obama firmó una orden ejecutiva en la que se delinearon penas económicas contra individuos y organizaciones involucradas en lo que definió como “manipular, alterar o causar una apropiación indebida de información con el propósito o efecto de interferir o socavar procesos o instituciones electorales”.

Las sanciones afectan a “nueve entidades e individuos”, dijo Obama.

“El Departamento Central de Inteligencia ruso (GRU) y el Servicio Federal de Seguridad (FSB), cuatro oficiales individuales del GRU y tres empresas que proporcionaron apoyo material a las operaciones cibernéticas del GRU”, precisó el mandatario saliente estadunidense.

El comunicado de la Casa Blanca señaló que “estas acciones se deben a las repetidas advertencias públicas y privadas que hemos emitido al gobierno ruso y son una respuesta necesaria y apropiada a los esfuerzos por dañar los intereses estadunidenses en violación de las normas establecidas de conducta internacional”.

De acuerdo con el texto, los esfuerzos para interferir en la elección son una amenaza para el proceso democrático.

El informe firmado por Obama apuntó que los rusos trataron de afectar elecciones anteriores a través del ciberespionaje, y que Estados Unidos responderá con acciones encubiertas como represalia.

El anuncio precisó que la administración de Obama presentará en los próximos días un informe al Congreso, con detalles “sobre los esfuerzos de Rusia para interferir en nuestras elecciones, así como la actividad cibernética maliciosa relacionada con nuestro ciclo electoral en las elecciones anteriores”.

Una declaración conjunta de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), el Departamento de Seguridad Nacional y el director de Inteligencia Nacional acusó a Rusia de haber realizado
durante diez años una campaña cibernética contra el gobierno, la infraestructura y los ciudadanos de Estados Unidos.

“Perjudicar relaciones ”

Rusia también aseguró que las sanciones buscan impedir el restablecimiento de las relaciones bilaterales con la próxima Administración de la Casa Blanca.

“Esos pasos unilaterales persiguen el objetivo de perjudicar las relaciones y dificultar su restablecimiento en el futuro”, dijo Konstantin Dolgov, representante del Kremlim para Derechos Humanos, Democracia y Estado de Derecho, a medios locales.

Acusó al actual gobierno de Barack Obama de “haber perdido el norte” con su “histeria sancionadora” contra Rusia, y tildó a los autores de esas denuncias, en particular a la derrotada candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, de intentar ocultar los problemas reales que afectan a la sociedad estadunidense.

Clinton acusó a Trump de aliarse con Putin y WikiLeaks para publicar miles de correos electrónicos para perjudicar su candidatura.