El director de Medio Ambiente en el Ayuntamiento capitalino, Óscar Chávez Chávez informó que no se descarta una auditoría al recurso que la administración municipal pasada aplicó en el Parque Industrial Ladrillero (PIL).

La duda surge de la mala calidad de los obradores, algunos de los cuales quedaron inservibles durante la pasada temporada de lluvias y del mal estado de las instalaciones de dicho parque ya que son “20 millones de pesos que realmente no se ven reflejados, al Parque Industrial Ladrillero yo creo que a lo largo de su vida se le han inyectado más de 400 millones de pesos y no se ven reflejados”, criticó.

El funcionario informó que en el padrón actualizado con que cuenta la Dirección Municipal de Medio Ambiente son 243 los productores de ladrillo que aún realizan esta actividad dentro de la mancha urbana, la mayoría de ellos concentrados en la colonia San Carlos y Jardines de Cancún.

“Hemos tenido pláticas ya con todas las asociaciones tanto del Parque Industrial Ladrillero como de las que quedan aquí en la ciudad y hay grandes avances en las pláticas para que ene u mediano plazo, tengamos fuera a un grupo importante de ladrilleros”.

Reconoció que la distancia a la que se encuentra el PIL sigue siendo uno de los principales retos para convencer a los productores de ladrillo, sin embargo, descartó que se pueda concretar la propuesta del regidor Antonio Posadas Sánchez, de comprar un terreno localizado a tres kilómetros del límite con la mancha urbana.

Justificó la lejanía del Parque con el hecho de que “se está cumpliendo con una norma de estar más lejos del punto cero de la ciudad, que es la Plaza de Armas, a 35 kilómetros”, y por ello no puede permitirse la instalación de obradores en un radio más cercano.

Con la llegada de la temporada invernal, en la que las bajas temperaturas provocan que el humo de las ladrilleras se disipe más lentamente, será una prioridad del gobierno municipal el lograr reinstalar el mayor número de productores de ladrillo fuera de la mancha urbana.