Los días continúan dentro de esta cuarentena, pero en un tono seco, sin luz, sin alegría, así es como lo siente todo aquel pambolero.

Como ya sabemos el Covid-19 ha paralizado todo el orbe y la orden a seguir es mantenerse en casa para que no continúe la propagación de este mortal virus.

Sin duda hay tensión en todos los habitantes del planeta ya que está pandemia arroja más 30 mil decesos y oscila en los 600 mil infectados.

Y como bien diría Jorge Valdano “el fútbol es lo más importante, de lo menos importante”.

Los aficionados a este bello deporte tienen ahogado el grito de gol en sus gargantas y es que la vida no es la misma sin los cánticos, sin los desbordes, sin barridas, sin las atajadas y por supuesto sin el gol.

En este momento los templos sagrados, si esos a los que algunos les llaman estadios o campos lucen sin alma, sin espíritu, lucen vacíos.

Hace falta que la pelota ruede pero para eso es necesario mantenerte en casa solo así volveremos a alucinar con nuestro fútbol.

Mientras te invito a ver a través de internet documentales, películas incluso todas aquellas esas hazañas que te hicieron vibrar, que te hicieron llorar, que te hicieron feliz.

Hoy todos somos un equipo contra un virus, pero mañana volveremos a vestirnos de nuestros colores y vivir eso que tanto nos gusta…