La presidenta de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Mayté Vivó Prieto informó que se espera una segunda mitad del año muy complicada a causa de factores externos, especialmente como resultado de la incertidumbre generada por la decisión de los ciudadanos británicos, para que la Gran Bretaña abandone la Unión Europea.

Mencionó que las acciones en cualquier bloque económico generan enormes implicaciones para todas las regiones, incluyendo desde luego a México.

“Tenemos que ver con prudencia los efectos en los mercados internacionales, comenzando con nuestra propia disciplina en gastos, inversiones y posibles adquisiciones de nuevas deudas”, aseguró Vivó Prieto.

La empresaria declaró que estarán pendientes de “las reacciones venideras en los mercados internacionales y de los comportamientos de la economía global para tener la capacidad de no sólo tomar las medidas respectivas, sino de analizar posibles oportunidades”.

Ante este panorama, tanto la Secretaría de Hacienda como el Banco de México, tomaron decisiones difíciles pero necesarias por su enfoque proactivo.

Dijo que el ajuste adicional al gasto público por 31 mil 715 millones de pesos que se anunció por parte de la Secretaría de Hacienda, junto con el anuncio de la Junta de Gobierno del Banco de México para aumentar en 50 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 4.25 por ciento, “son medidas que esperamos permitan la normalización en las expectativas inflacionarias y de crecimiento económico”.

Vivó Prieto, indicó que con lo que respecta al mercado interno, es necesario impulsar un mayor crecimiento de la economía y que este se acompañe con un equilibrio en el gasto público: “el Gobierno Federal también debe hacer un esfuerzo para recortar el gasto público no prioritario”.

Señaló que serían malas señales del gobierno federal si las medidas económicas tales como el incremento de los costos de las gasolinas y la energía eléctrica por la reducción de subsidios, no van acompañadas de mayor austeridad y transparencia en el ejercicio del gasto público.

Indicó que la política económica no debe seguir recargándose solamente en la sociedad. “Para fortalecer las finanzas públicas, la mejor estrategia sigue siendo reducir la informalidad y aumentar la productividad y la competitividad, base fundamental para el crecimiento y el desarrollo económico”.

“Coincidimos respecto a que la estabilidad macroeconómica debe ser preservada. Es una condición del desarrollo. Pero el Estado tiene que hacer más, mucho más, que las empresas y las personas para lograrlo”, finalizó Mayté vivó.