“La obra que sale mal”, teatro en el teatro
Tras enfrentarse hace unos días a un texto desconocido hasta su función única en la obra Nassim, Irene Azuela está a punto de subirse al escenario con otra historia desafiante. Se trata de La obra que sale mal (The Play That Goes Wrong), que fuera ganadora como la Mejor Comedia del Año en los Premios […]
Tras enfrentarse hace unos días a un texto desconocido hasta su función única en la obra Nassim, Irene Azuela está a punto de subirse al escenario con otra historia desafiante.
Se trata de La obra que sale mal (The Play That Goes Wrong), que fuera ganadora como la Mejor Comedia del Año en los Premios Olivier 2015, Mejor Escenografía en los Premios Tony 2017 y Mejor Obra en los Broadway Audience Choice Award.
La puesta en escena, que abrirá el telón el 12 de julio en el Teatro Helénico, aborda lo que sucede en el proceso ante un montaje teatral, que tiene todos los elementos para llevar a la compañía de una equivocación a otra. Una comedia para quien lo observa desde fuera y una tragedia para quienes participan en ella.
“La obra que sale mal tiene la característica de que tiene que salir muy bien para que salga mal. Es una obra que empezó en Londres, de tres estudiantes de la London Academy of Music and Dramatic Art (Lamda), la escuela donde tuve la oportunidad de estudiar hace unos años, y es uno de esos proyectos de teatro que nacen con estrella.
“Estuvo en el West End y lo transfirieron a un teatro en Broadway, así que no ha parado de viajar. El director Mark Bell, quien fue mi maestro en esa escuela, vino directamente a ponerla, por eso las jornadas han sido tan pesadas, de ocho horas, además de que lo necesita la obra. Tiene una coreografía que tiene que salir perfecta para que las cosas salgan mal y el público pueda reírse de lo que pasa”, expresó Azuela en entrevista con Excélsior.
La propuesta de la compañía mexicana –integrada también por Adrián Vázquez, Ari Albarrán, Iván Carbajal, Artús Chávez, Daniel Haddad, Juan Carlos Medellín y Luis Guana Rodríguez– es la historia de un grupo de actores amateur orgullosos de estrenar la obra que llevan tantos meses ensayando, aunque en la presentación todo empieza a fallar. “A los cinco minutos que inicia la obra, ya pasó algo que de verdad está muy mal y es entonces cuando nos preguntamos en dónde acabará la situación. En esa medida será muy entretenida para el público”, dijo. Azuela llevará el papel de Sandra, la actriz de la obra, quien se toma su carrera muy en serio, considera que el montaje cambiará el rumbo de su carrera y recibirá un premio Oscar.
Es teatro dentro del teatro. Es por eso que Irene se identifica, pues desde luego que ha vivido alguna equivocación en alguno de sus trabajos, ya sea de ella o de sus compañeros, accidentes que salvar en el momento de cada función.
“Lo que me parece muy interesante es hacer un personaje al que se le va la vida por una función de teatro cuando yo he estado ahí y siento que mi vida depende de eso. Es muy lindo vivir esta obra de otra manera y darme cuenta que no es tan grave; incluso poderme reír de eso. En la medida en que me tome las cosas seriamente, entonces la gente se va a reír”, señaló.
“El hecho de estar dispuesta a que se rían de mí habla de una relajación mucho mayor a la que he tenido en otros años en mi carrera”, concluyó.
Excélsior
