Max von Sydow, recordado como el sacerdote de “El Exorcista”
Max von Sydow, actor conocido entre los seguidores del cine independiente por su trabajo con el director sueco Ingmar Bergman y por los cinéfilos del mundo como el sacerdote en el clásico del terror El exorcista, falleció a los 90 años. Von Sydow, quien nació en Suecia, pero se hizo ciudadano francés, murió en Francia. […]
Max von Sydow, actor conocido entre los seguidores del cine independiente por su trabajo con el director sueco Ingmar Bergman y por los cinéfilos del mundo como el sacerdote en el clásico del terror El exorcista, falleció a los 90 años.
Von Sydow, quien nació en Suecia, pero se hizo ciudadano francés, murió en Francia.
Desde que debutó en 1949, en la película sueca Solo una madre, von Sydow apareció en cerca de 200 producciones de cine y televisión. Recibió dos nominaciones al Oscar, como Mejor Actor en 1988 por Pelle el conquistador), y a Mejor Actor de Reparto en 2012 por Tan fuerte y tan cerca. Recientemente, fue postulado a un Emmy por su trabajo como el Cuervo de Tres Ojos en la serie Game of Thrones.
Von Sydow fue un pilar en una docena de clásicos de Bergman, entre ellas Las fresas silvestres, Vergüenza y El séptimo sello.
Von Sydow debutó en Hollywood como Jesús en la película de 1965 La más grande historia jamás contada, pero alcanzó la fama internacional como el sacerdote librador del demonio en el polémico y exitoso filme de William
Friedkin de 1973 El exorcista.
Alto y desgarbado, de ojos azules taciturnos, rostro alargado, piel pálida y un modo hablar profundo y con acento, von Sydow a menudo fue encasillado en Hollywood como el villano sofisticado.
En 1980 interpretó al emperador Ming el Despiadado en Flash Gordon. Apareció como el villano amante de los gatos Ernst Blofeld en Nunca digas nunca jamás, cinta de James Bond protagonizada por Sean Connery.
También dio vida a un pintor atormentado en la cinta de Woody Allen, Hannah y sus hermanas, y al diablo en Pacto con el diablo, cinta de terror basada en una novela de Stephen King. En 2015, tuvo un pequeño papel en Star Wars: El despertar de la Fuerza.
Aunque sus personajes a menudo eran siniestros, atormentados o malvados, von Sydow, de voz suave, dijo que se hizo actor para superar su timidez.
“Fui tímido de niño. Cuando empecé a actuar en un grupo amateur en la escuela secundaria, aunque no estaba consciente de ello en ese momento, de pronto tuve una herramienta en mis manos. Podía expresar toda clase de cosas extrañas que jamás me atreví a expresar antes.
“Ahora podía hacerlo con el personaje como un escudo, como una defensa, y como una excusa. Debo confesar que por muchos años usé mi profesión como cierto tipo de terapia sicológica”, dijo en su momento en una entrevista.
Von Sydow nació el 10 de abril de 1929 en una familia de académicos en la ciudad de Lund, en el sur de Suecia. Fue bautizado Carl Adolf von Sydow, pero más tarde se cambió el nombre de pila a Max, argumentando que el suyo “no era un buen nombre” luego de la Segunda Guerra Mundial.
Aunque su familia no estaba interesada en el teatro, dijo que su padre era un maestro contando historias de aventura que alimentaban su imaginación de niño. Decidió que quería ser actor y formó una sociedad teatral con sus amigos tras ver su primera obra, El sueño de una noche de verano, de Shakespeare, a los 14 años.
Se formó en el Teatro Dramático Real de Estocolmo y actuó en pequeños teatros municipales en Suecia por ocho años, una experiencia que luego describió como crucial para su carrera.
De hecho, fue durante ese periodo que conoció a Bergman. Además de El séptimo sello, protagonizó otras 10 de sus películas, incluidas también El rostro y El manantial de la doncella. A partir de ese momento desarrolló una relación muy estrecha con el realizador más famoso de Suecia.
Von Sydow se casó con la actriz sueca Christina Olin en 1951 y juntos tuvieron dos hijos, Clas y Henrik. La pareja se divorció y en 1997 él se casó con la cineasta francesa Catherine Brelet, con quien tuvo dos hijos más, Yvan y Cedric.
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