Lo que parecía un lindo día de playa en familia, se convirtió en una pesadilla para un pequeño que solo se limitaba a disfrutar del agua cristalina en una de las islas de Las Bahamas.

Según se ve en algunas imágenes difundidas en YouTube, el menor entró al agua y se quedó a nadar muy cerca de la orilla, una decisión muy cautelosa teniendo en cuenta los peligros del mar.

Pero, lamentablemente cuatro tiburones estaban a tan solo unos metros del menor y según se ve en YouTube, decidieron nadar directamente hacia él. Por suerte, en ese momento un dron captaba el hermoso paraíso tropical, lo que le permitió a su dueño advertirle al pequeño del peligro.

Los tiburones llegaron hasta la orilla de la hermosa playa, situándose a tan solo dos metros del niño.

Afortunadamente el pequeño escuchó los gritos del operador del dron y salió directamente hacia la playa para ponerse a salvo.