Rubén Calderón Luján, como rector de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), durante el sexenio de Ismael Hernández Deras, apoyó a José Rosas Aispuro Torres, en sus aspiraciones políticas.

La apuesta de Calderón Luján en un escenario tan cerrado como la elección de 2010 por el Gobierno estatal, fue abrirle espacios a José Aispuro.

El final de esa elección, no favoreció a “El Güero”, quien perdió por 11 mil 200 votos la gubernatura frente al priista Jorge Herrera Caldera.

La afrenta no la olvidó el grupo de Ismael Hernández Deras, menos Herrera Caldera, quien asumió el poder el 15 de septiembre de 2010 y en menos de dos semanas vengó la afrenta de Calderón, vía la mayoría en el Congreso local, quitándole la autonomía a la UJED e imponiendo un rector.

El periplo de los universitarios inició en ese momento, y sigue sin resolverse el asunto de la autonomía, pese a que Aispuro ganó la elección hace más de un año.

Y es que una de las banderas de Aispuro Torres fue devolverle la autonomía a los universitarios. Muestra de ello es su declaración del 25 de mayo de 2016, cuando aseveró que en su mandato como gobernador, la Universidad Juárez del Estado de Durango “iniciaría el proceso necesario para recuperar su autonomía; y desde el 15 de septiembre”, esa institución dejaría de ser una dependencia más del estado, porque serán los universitarios quienes decidan su destino y administración”.

A más de un año transcurrido del plazo que se autoimpuso, Erasmo Návar, designado en el sexenio de Herrera Caldera, sigue como rector.

Ayer, integrantes del Frente por la Autonomía Universitaria, publicaron un posicionamiento con relación a la falta de cumplimiento de los acuerdos, y volvieron a demandaron la salida de Návar.

En ese escrito subrayan que el actual rector, es de los personajes cercanos a Antonio Herrera Caldera, hermano del ex gobernador Herrera Caldera, y no ha cumplido con un acuerdo firmado en abril pasado, tras la manifestación de integrantes de este Frente, en demanda de la devolución de la autonomía y la renuncia de Návar.

Ahora falta esperar, si el gobernador José Rosas Aispuro atiende su promesa hecha con los universitarios o si mantiene el statu quo en la UJED, del cual son parte los emisarios del anterior sexenio priista.